Eran las 8 y media de la tarde cuando se abrían
las puertas de San Francisco, nuestra Hermandad salía a la calle para realizar
su estación de penitencia. Numerosos eran los estrenos que nuestra hermandad sacaba a la
calle, entre los que destacaban la nueva cruz de guía, la nueva túnica de
Nuestro Padre Jesús de la Rosa realizada en sarga morada y también las nuevas túnicas
de los costaleros del paso de Nuestra Señora del Mayor Dolor. Estas túnicas han
sido realizadas por miembros de nuestra hermandad durante este pasado verano en
el taller de costura que ha realizado nuestra hermandad y también nos han
ayudado varias costureras, cercanas a esta cofradía, que han prestado su tiempo
y dedicación.
Acompañaban a los pasos, hermanos penitentes,
mujeres de mantilla y los Hermanos Mayores para este año. En el paso de nuestro
titular, sus hermanos de varal y para el paso de nuestra titular, Francisco e
Isabel.
Todo iba perfecto hasta que al
paso de nuestra hermandad por el final de la calle Nueva comenzó a llover, lo
que hizo que la comitiva se tuviera que dar la vuelta y volver a San Francisco.
Momentos muy emotivos los vividos, lágrimas entre los cofrades y fieles que
abarrotaban las calles al paso de nuestros titulares. Gran esfuerzo el
realizado por los hermanos de varal que a toda prisa corrieron para entrar a
nuestros titulares en la parroquia.
El título lo dice todo, dulce porque disfrutamos un momento de ellos
en la calle y agrio porque después de todo el trabajo realizado por nuestra
hermandad durante este año no se ha podido mostrar al pueblo de Rute.
Una vez dentro de la iglesia,
nuestro paisano Paco Chamorro dedicó una saeta a Jesús de la Rosa,
posteriormente se produjo la bendición de nuestro titular, las puertas de San
Francisco permanecieron abiertas hasta bien entrada la noche para que los
fieles pudieran ver a nuestra imágenes que con tanto esmero y cariño habían preparado
sus cofrades para deleite del pueblo Ruteño. Gracias.